Sucia: Una obra muy dolorosa y necesaria sobre el abuso sexual

Sucia: Una obra con actores valientes que levanta conciencias.

Hay obras de teatro que no son cómodas para nada, no tienen que serlo, al contrario sirven para concienciar a los espectadores de un problema vergonzoso que pasan todos los días. Nos referimos al abuso sexual. Sucia es una obra dirigida e interpretada por Bárbara Mestanza y acompañada en la interpretación por Nacho Aldeguer.

Sinopsis

SUCIA no solo es el análisis exhaustivo sobre una historia de abuso, sino que analiza el sistema que produce agresores y víctimas. Mediante entrevistas con expertas y expertos en diversos aspectos de este campo, logra generar una visión lo más objetiva posible sobre este asunto que nos interpela a todxs. Entenderemos el abuso no solo como casos aislados, sino como la estructura base en la que nuestro sistema se fomenta.
En un momento en el que los abusos, a causa de la pandemia, van en aumento, nos planteamos tratar este tema intentando trazar un puente que nos ayude a comprender la complejidad de un problema que nos atraviesa a todxs por igual.

Para hacerlo, SUCIA nos propone un cambio de roles con la intención de generar una empatía y entendimiento transversal independientemente del género con el que te identifiques.

Critica

En unos tiempos donde se ven demasiadas cosas tanto en cinecxomo en televisión, que una obra de teatro cause tanto debate e incluso que horas después siga en tu cabeza es porque lo que has visto te ha cambiado de alguna tu forma de pensar. Por ese motivo Sucia me ha parecido una obra excelente y una de las mejores que he visto en mi vida como espectador.

Una obra que va directamente a las entrañas del machismo, donde se nos pone en bandeja varias situaciones que pone en entredicho a una sociedad que apoya al machismo. el trabajo de Bárbara Mestanza es simplemente extraordinario, un trabajo personal y valiente. Es increíble ver a una actriz tan comprometida y con tanto talento,. Me encantaria verla en más obras porque ha sido un descubrimiento increíble. Nacho Aldeguer también pone toda la carne en el asador  además de levantar la obra desde el principio y acompañando a Barbara en su relato. El actor sorprende por sus variados registros y también por la inmensa valentía que demuestra en el escenario.

Sucia es una obra llena de verdad, también de dolor pero no se aprovecha del tema para sacar lagrimas fáciles. Sucia busca soluciones, busca que se entienda a las mujeres y sobre todo busca que seamos más sensibles ante un problema que podemos sufrir todos, pero que la mayoría de las veces lo sufren por desgracia ellas.

Sucia me ha cambiado como persona, ya antes era feminista y estaba muy concienciado sobre los abusos sexuales pero por suerte la cultura siempre nos puede ayudar a seguir avanzando. Gracias al teatro La abadía por programar una obra tan valiente, también al equipo de Sucia, a Nacho y sobre todo a Barbara por tanta generosidad.

 

Recomendada para: Para aquellos que quieran ver una historia real que te transforma desde el primer minuto.