Siervos: Tediosa película sobre el conflicto de dos jóvenes curas

Siervos: Ganadora de mejor dirección en la Seminci de Valladolid

Hay cine que se puede considerar de arte y ensayo, dando más importancia a crear unas imágenes icónicas que a contar una historia atrayente. Un riesgo que para mí asume Siervos dirigida por Ivan Ostrochovský y protagonizada por Vlad Ivanov y Martin Sulík

Sinopsis

Año 1980. Michal y Juraj son estudiantes de Teología en un seminario de Checoslovaquia. Sus tutores, atemorizados con el cierre de la escuela, moldean a los seminaristas para satisfacer las directrices del Partido Comunista. Bajo estas circunstancias, los jóvenes estudiantes deben decidir entre caer en la tentación y elegir el camino más fácil colaborando con el régimen o, por el contrario, defender sus convicciones y someterse a las presiones de la policía secreta.

Criticas

Tengo que reconocer que la trama de Siervos me interesa mucho, ese conflicto que sufren los personajes me parece muy interesante y sobre todo me parece apasionante que esto se hubiera desarrollado de otra manera. Pero lo que a mi no me conmueve de Siervos es la forma de estar narrada. Planos muy bonitos pero que en su mayoría no aportan nada a una historia que merecía un guion más elaborado y ser menos una película para festivales (donde la película ha triunfado en escenarios tan importantes como la Seminci de Valladolid donde ganó el premio a la mejor dirección y una gran acogida en la Berlinale)

A mi la verdad aunque a veces este tipo de cine me convence no es el caso, ya que esta película que tiene una duración de 75 minutos me ha parecido que duraba mas de dos horas. Un film tedioso y que la verdad es que no se mete  de lleno en el gran conflicto de los protagonistas. Un guion más elaborado hubiera dado una película emocionante y mucho más efectiva que lo que nos presenta Siervos.

Recomendada para: Aquellos que prefieren planos a una historia elaborada.