Rojo: No consigue rematar la faena

Rojo: No consigue levantar su interesante propuesta.

A veces recordar no incita a la nostalgia de los tiempos ya pasados, puede ser que fueran unos años oscuros donde la política y la sociedad no estuvieran siempre a la altura de las circunstancias. Rojo dirigida por Benjamín Naishtat está protagonizada por Darío Grandinetti. 

Sinopsis:

A mediados de los años 70, un hombre extraño llega a una tranquila ciudad de provincia. En un restaurante, y sin motivo aparente, comienza a agredir a Claudio, un reconocido abogado. La comunidad apoya al abogado y el agresor es humillado y expulsado del lugar. Más tarde y camino de casa, Claudio y su mujer, Susana, son interceptados por el hombre extraño. El abogado toma entonces un camino sin retorno de secretos y silencios.

Crítica:

El cine negro clásico siempre ha sido una debilidad para mí, Rojo tiene elementos del cine negro americano, pero no consigue en ningún momento que conectamos con la trama que nos propone el filme. Tras un brillante comienzo la película poco a poco cae por su propio peso y no consigue en ningún momento remontar.

A pesar de que el ritmo puede llegar a ser palpitante, no termina de explotar todas las cartas que juega la cinta, dejando una propuesta vacía donde nada es destacable. Grandinetti tiene buenos momentos pero en ningún momento (salvo la escena del principio) consigue que su personaje llegue a traspasar la pantalla.

Como siempre digo, esto es una opinión personal mía en un filme que fue uno de los triunfadores del Festival de San Sebastián donde consiguió premios a mejor Dirección, Mejor actor y mejor fotografía. Juzguen ustedes mismos aunque a mi personalmente me ha parecido una propuesta que no ha despertado mi interés.

Recomendada para: Espectadores que gusten de cine argentino y que se fíen del criterio de un festival tan prestigioso como el de San Sebastián.