El triunfo: Una comedia que emociona y reconforta.

El triunfo: Kad Merad protagoniza la mejor comedia europea del año.

Reconozco que hay películas que aunque a muchos no gusten el termino son realmente necesarias para la sociedad. Como el teatro un bien que deberíamos ver todos pero que parte del publico ignora desgraciadamente. El triunfo está dirigida por Emmanuel Courcol y está protagonizada por Kad Merad. 

Sinopsis

Aunque esté en el paro con frecuencia, Etienne (Kad Meran) es un entrañable actor que dirige un taller de teatro en un centro penitenciario. Allí reúne a un grupo insólito de internos para representar la famosa obra de Samuel Beckett ‘Esperando a Godot’. Cuando consigue la autorización para realizar una gira fuera de la cárcel con su pintoresca troupe de actores, a Etienne se le presenta finalmente la ocasión de prosperar.

Cada cita con el público se convierte en un nuevo éxito, y entre la improvisada compañía y su director se va forjando una relación única. Pero antes de que se dé cuenta, llega el momento de la última representación, que tendrá lugar en París. ¿Será esa función de despedida el mayor éxito del grupo?

Critica

Siempre he estado muy a favor de la comedia social y El triunfo es una de primer nivel, una película basada en un hecho real que habla de segundas oportunidades y lo más importante como el teatro es una de las mejores formas de redención y una de las terapias más exitosas.

Un film que llega a provocar las risas pero que también emociona, realmente emocionante es la interpretación de Kad Merad uno de los actores más populares en Francia que gracias a su naturalidad consigue meterse al espectador en el bolsillo. Sin desmerecer a los demás actores del grupo de presos que están a la altura de la estrella Francesa.

Si queréis disfrutar de una comedia tierna y verdadera no os podéis perder El triunfo que no os arrepentiréis.

Recomendada para: Los que quieran ver una comedia sencilla pero llena de significado.

En pocas palabras: El triunfo es una comedia donde el arte es la mejor forma de redención y una terapia sanadora. Kad Merad emociona gracias a su interpretación