Cómo ser un french lover: Entretenida y divertida comedia

Cómo ser un french lover: Más profunda de lo que puede parecer a simple vista.

Las ambiciones que tenemos para nuestra vida, a veces, pueden ser superficiales o directamente equivocadas. De eso y mucho más, habla Cómo ser un french lover comedia francesa dirigida por Olivier Baroux y protagonizada por Kad Merad.

Sinopsis:

¿Cómo ser feliz y rico, sin trabajar? Siendo un gigoló. Pero tras 25 años de vida en común con Denise, Alex, el gigoló, es despedido de la noche a la mañana, y se queda en la calle. Obligado a irse a vivir a casa de su hermana y de su sobrino de 10 años, Alex solo piensa en una cosa: encontrar a otra rica heredera.

Crítica:

Cuando vi el cartel de Cómo ser un French lover, me imaginé que sería otra cosa, una comedia grosera que seguramente no me iba a gustar. Pero, por suerte, he descubierto una entretenida película más profunda de lo que parece. Sin duda, lo mejor de la película son los primeros minutos cuando el protagonista de la historia es joven y vemos sus verdaderas intenciones. El film habla de cómo tenemos que aceptar el paso del tiempo y también de que algunas decisiones nos pueden dejar solos de por vida.

Igualmente estamos hablando de una comedia donde te ríes bastante gracias al carisma de  Kad Merad que realiza un buen trabajo, además el guión tiene suficientes puntos de humor para que nunca baje el ritmo en sus 94 minutos de duración. Un film perfecto para pasar una tarde divertida y reírnos de hasta qué punto somos superficiales los seres humanos. Además, como ya dije, Cómo ser un French lover es más profunda de lo que parece y eso siempre es positivo.

Recomendada para: Espectadores que quieran pasar una tarde divertida y para reírnos del paso del tiempo y de nosotros mismos.