Las canciones: Una obra soberbia y emocionante. De obligado visionado

Las canciones: Una obra que arranca ovaciones en pie del PÚBLICO con total justicia.

El arte tiene la cualidad de evadirnos de un mundo que, a veces, nos llega a superar. La música es, sin duda, es una de las mejores vías de escape y de eso trata Las canciones que se puede ver en el Teatro Kamikaze. Dirigida por Pablo Messiez e interpretada por Javier Ballesteros, Carlota Gaviño, Rebeca Hernando, José Juan Rodríguez, Íñigo Rodríguez-Claro, Joan Solé y Mikele Urroz.

Sinopsis:

Las canciones nace del deseo de ocuparnos del sentido siempre abierto, el primero: el escuchar. Escuchar el mundo y escuchar su música contra la que ningún párpado protege puesto que, como dice Quignard, ningún párpado se cierra sobre la oreja.

En Las canciones, un grupo de personas se reúne para escuchar diversas músicas. Y lo que en principio parecía un acto inofensivo –un grupo de gente escuchando y cantando canciones– termina por transformarlos a todos.

Es lo que sucede al asomarse a algún misterio.

Crítica:

El inicio de temporada en el Teatro Kamikaze no puede ser mejor, Las canciones es una obra que nos sumerge en la historia de unos personajes que están hartos de pasarlo mal y que sólo encuentran como vía de escape una serie de canciones, que hacen que se sumerjan en un mundo de emociones controladas.

Una obra que combina hábilmente el drama y algunos toques de humor que consiguen mantener la atención del espectador en todo momento. Todos los actores están soberbios en sus respectivos papeles, hacía tiempo que no veía a unos actores tan valientes y una obra tan redonda como Las canciones.

Hasta tal punto recomiendo esta obra que ha conseguido que, por primera vez, me haya levantado a aplaudirles al final de la misma. Porque sin duda Las canciones se merece una gran ovación y todos los reconocimientos del mundo. Gracias por crear una obra de arte tan redonda, tan mágica y que consigue despertar sentimientos que desgraciadamente escondemos en nuestra vida diaria.

Recomendada para: Espectadores que quieran vibrar con una obra de teatro perfecta. Además tiene uno de los momentos más locos y hermosos del teatro reciente.